Abrocha tu cinturón y acelera tus finanzas, es hora de ahorrar para un auto. Esta semana, los expertos de Pangea te enseñan a diseñar un plan de ahorros y comparten recursos para que dejes de dar vueltas en círculos. Ya sea para un auto nuevo, usado o un intercambio, con estos tips tomarás mejores decisiones.
Define tus opciones
Establece el monto aproximado que tienes planificado gastar. El primer paso es definir cuáles automóviles se ajustan a tus necesidades y a tu presupuesto. A todos nos encantaría el último modelo del auto deportivo italiano, ¿pero alguna vez has intentado meter un mercado en el maletero? Es una pesadilla.
Ver las opciones es la parte divertida del proceso. Considera el año, las funciones, la marca o el kilometraje para determinar el rango de precio y tipo de vehículo ideal para ti. Por ejemplo, si necesitas un auto para tus traslados diarios, busca un auto confiable, con buen rendimiento del combustible y fiabilidad. Si tienes una familia, opta por un vehículo espacioso y seguro.
Consumer Reports es un recurso para ver reseñas imparciales de distintos modelos de autos, calificaciones e historias de propietarios que te ayudarán en el proceso. ¿Qué mejor recomendación que la de aquellas familias que ya han tenido el auto? Ya que la información es adquirida de miles de propietarios que comparten sus experiencias y opiniones, podrás obtener una perspectiva real sobre las funciones, confiabilidad, costos de mantenimiento y problemáticas comunes.
Kelley Blue Book es otra herramienta en la que puedes obtener información precisa sobre precios de carros nuevos y usados. Con KBB, puedes comparar precios fácilmente según el año, la marca, el modelo y el kilometraje. Esta información te ayudará a escoger el auto que mejor se adapte a tu presupuesto, así como a escoger la opción más rentable a largo plazo, limitando los gastos inesperados y reparaciones.
Determina el pago de la inicial
Ahora que fijaste la mirada en un auto y un rango de precio, ¿cuánto necesitas realmente llevar al concesionario? Fijar el monto de la inicial se trata de equilibrio. Aunque por lo general se recomienda que sea de un 20%, no es una regla. Los expertos recomiendan apuntar desde el 10% al 20% del precio del auto, esto ayuda a reducir el monto del préstamo, reduce los pagos mensuales, e incluso pudieras llegar a ser candidato a mejores tasas de interés.
Empieza a ahorrar
Con esta nueva meta de ahorro, el primer paso es evaluar tu presupuesto y tu estrategia financiera.
Reduce los gastos innecesarios y trata de que el 20% de ingreso mensual esté destinado a tus ahorros.
Automatizar tu cuenta de ahorros es una manera fácil de mantenerte en el carril. Mientras ahorras, también es recomendable buscar opciones de mayor rendimiento. Evalúa cuentas de ahorro de alto rendimiento, cuentas corrientes, o certificados de depósito que ofrezcan mejores rendimientos que las cuentas bancarias tradicionales. Al alimentar tus ahorros con estas opciones, aumentan la posibilidad (y la velocidad) de alcanzar tu meta.
No olvides la importancia de tu puntaje de crédito. Un buen historial de crédito puede significar mejores préstamos. Proponte a pagar tus facturas a tiempo, mantener bajo tu uso de crédito, y revisar tus reportes de crédito para que no tengan errores. Experian Boost es una forma fácil de darle un impulso a tu historial a través de un historial de pagos positivo, mejorando tu credibilidad en general.
Determina el valor de tu vehículo actual
Si estás considerando vender o intercambiar tu auto actual para financiar el nuevo, tienes dos opciones, venderlo de forma particular o cambiarlo en un concesionario. Cada opción tiene sus ventajas y desventajas.
Venderlo de forma particular por lo general te permite obtener un mayor precio para tu nuevo auto en comparación a los concesionarios. Lo malo, es que venderlo directamente te tomará más esfuerzo, desde la publicidad, hasta el proceso de negociación y la gestión del papeleo. También deberás invertir tiempo y dinero en cualquier reparación cosmética o mecánica para que esté listo para la venta.
Por otro lado, intercambiarlo en un concesionario es fácil y conveniente. Esta opción ofrece ventajas fiscales, reduciendo la deuda de tus impuestos. Desafortunadamente, los concesionarios ofrecen menos dinero en comparación a lo que ganarías si lo vendes tú mismo. Al final del día, tú eliges lo que mejor se adapte a tu meta, tiempo y preferencias.
Con el carro de tus sueños en la mira y un plan de ahorros en acción, estarás detrás del volante antes de lo que imaginas. Y con estas recomendaciones de los expertos de Pangea, el camino será más suave.
Esta guía se proporciona con fines educativos, y su contenido no debe tomarse como asesoría personal o como una oferta de crédito.
