Debes ser el principal accionista de tu salud. Aunque sea costoso mantener un estilo de vida saludable y estar al día con tus visitas al médico (¡cada mensualidad del gimnasio afecta al presupuesto!), hay muchas maneras de gastar sabiamente en tu bienestar. Estas son algunas maneras de invertir en tu salud sin estrés financiero.

 

La prevención es clave

La mejor cura es la prevención, tanto para tu salud como para tus finanzas. Estas medidas te ayudarán a evitar gastos médicos en un futuro. 

Hacer revisiones y exámenes médicos es esencial para mantener una buena salud. Si cumples con tus visitas rutinarias, podrás detectar cualquier condición a tiempo, lo que significa que el tratamiento será más fácil, más exitoso y, por lo general, más económico.

Si contamos con presupuesto limitado, es más difícil hacer visitas regulares al consultorio. Estas son algunas opciones más asequibles:

  • Las clínicas comunitarias por lo general ofrecen servicios gratuitos a bajo costo o a tarifas variables según el nivel de ingreso. Para encontrar una clínica comunitaria cerca de ti, visita https://findahealthcenter.hrsa.gov/
  • Algunas organizaciones sin fines de lucro ofrecen servicios sanitarios para aquellos que no pueden costear cuidados médicos tradicionales. Una de esas organizaciones es la red de Volunteers in Medicine (VIM), https://volunteersinmedicine.org/
  • Quizás calificas para participar en programas gubernamentales de asistencia, que ofrecen sanitarios subsidiados. Para saber si puedes aplicar, visita la página web oficial de los Centros de Servicios de Medicare & Medicaid (U.S. Centers for Medicare & Medicaid Services) en https://www.cms.gov/.

Otro aspecto importante es mantenerte al día con tus vacunas. Una enfermedad te puede drenar, tanto física como económicamente. Faltar al trabajo o pagar guarderías o niñeras afecta gravemente tu presupuesto. Las vacunas ofrecen la mejor protección contra enfermedades comunes, haciendo que seas totalmente inmune o que los síntomas sean más leves si te llegas a enfermar.

 

Usa los beneficios de tu seguro

Aprovechar los beneficios de tu seguro médico es una buena estrategia para ahorrar en servicios sanitarios. Para esto, es crucial entender las especificaciones de tu póliza. Tómate un momento para revisar los documentos y familiarizarte con detalles importantes como límites de cobertura, deducibles, copagos, y cualquier restricción o exclusión. Esta información te ayudará a tomar decisiones más informadas sobre tu salud y a usar tus beneficios de forma efectiva. 

Muchos planes ofrecen coberturas de servicios preventivos sin costo adicional, incluyendo exámen físico anual, vacunación, controles y consultas para diferentes condiciones de salud. Si provechas estos beneficios preventivos, podrás detectar a tiempo cualquier condición y tratarla antes de que sea más grave o más costosa. 

Otra manera de ahorrar dinero en tu salud es optar por fármacos genéricos. Estos medicamentos contienen los mismos principios activos que los medicamentos de marcas reconocidas, pero por lo general son más económicos. Pregunta a tu médico tratante o al farmacéutico cuáles son las opciones genéricas para tus prescripciones. Adicionalmente, hay varias páginas web y recursos que te ayudarán a comparar precios y encontrar las mejores promociones. Algunas páginas son:

  • GoodRx (www.goodrx.com): GoodRx te permite buscar prescripciones y comparar precios en las farmacias más cercanas. También ofrece cupones y descuentos que pueden reducir significativamente el costo de tus medicinas.
  • NeedyMeds (www.needymeds.org): NeedyMeds es una organización sin fines de lucro que ofrece información sobre programas de asistencia al paciente, cupones y tarjetas de ahorro en prescripciones. Ofrecen recursos que ayudan a encontrar opciones asequibles para sus medicamentos.

Recuerda consultar el formulario del plan de tu seguro médico, que es una lista de medicamentos incluidos en la cobertura, para ver si se encuentran las alternativas genéricas de tus medicamentos. 

 

Invierte en tu alimentación y actividad física

Tus hábitos de alimentación y ejercicios juegan un papel fundamental en la prevención de enfermedades crónicas y en tu salud en general. Con una dieta rica en frutas, vegetales, granos y proteínas, tu cuerpo recibirá todos los nutrientes necesarios para su funcionamiento óptimo. 

Comer saludable no tiene que ser costoso. Con organización e información, podrás nutrir tu cuerpo sin que afecte tu bolsillo. 

  • Planifica tus comidas: Planifica tus comidas por adelantado y haz una lista de compras. De esta manera, evitarás hacer compras impulsivas y no desperdicias alimentos, ahorrando así dinero y recursos. 
  • Cocina en casa: Preparar tus comidas en casa te permite tener más control sobre los ingredientes y las porciones, lo que promueve hábitos alimenticios más saludables y gastarás menos dinero que comiendo en restaurantes. 
  • Compra al mayor: Comprar alimentos no perecederos suele ser más económico si los llevas en mayor cantidad. Ten en cuenta las fechas de vencimiento para evitar desperdicios. 

De igual forma, hacer actividad física regularmente ayuda a mantener un peso saludable, fortalece tu sistema cardiovascular y tu sistema inmune. Al mantener un estilo de vida saludable, se reduce el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, y costosas, como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, o condiciones relacionadas a la obesidad. Toma medidas para evitar lesiones. Recuerda calentar y estirar, y detén el ejercicio si notas alguna molestia. 

El ejercicio es crucial para mantener una buena salud. Sin embargo, no necesitas una costosa membresía en el gimnasio:

  • Actividades al aire libre: Aprovecha los espacios públicos. Realiza actividades como caminar, trotar o montar en bicicleta en tu vecindario o en parques. Estas opciones no solo ayudan a ahorrar, sino que también disfrutarás del aire puro y de la vitamina D del sol. 
  • Entrena en casa: Busca rutinas de ejercicios gratuitas en internet, o invierte en equipo básico como ligas de resistencia o una cuerda de saltar. Puedes diseñar rutinas efectivas sin necesidad de equipo de gimnasio. 
  • Programas comunitarios: Investiga si en tu comunidad hay programas o actividades grupales de bajo costo o gratuitas. Formarás parte de un grupo de apoyo mientras te mantienes en tu presupuesto. La YMCA es una organización reconocida que ofrece instalaciones, clases y programas a lo largo de los Estados Unidos. Visita su página web para encontrar la locación YMCA más cercana y explorar actividades asequibles. 

 

Invierte en tu salud mental

No dejes a un lado tu salud mental, ya que afecta desde tus relaciones hasta tu nivel de productividad y felicidad en general. El estrés y las emociones negativas suelen manifestarse en el cuerpo en forma de enfermedades. Afortunadamente hay maneras de priorizar e invertir en tu salud mental sin que tus finanzas se vean afectadas. 

La forma más fácil y natural es construir una red de apoyo entre tus amigos, familiares o comunidades. Estas relaciones ofrecen asistencia emocional, un hombro en el que llorar o un sentido de pertenencia. Adicionalmente, hay centros comunitarios y organizaciones que ofrecen servicios terapéuticos o grupos de apoyo gratuitos o de bajo costo, siendo recursos invaluables para aquellos que buscan ayuda profesional. 

Hacer actividades de cuidado personal es otro aspecto vital de la salud mental. Actividades sencillas como caminar en la naturaleza, leer, practicar mindfulness o meditación, en fin, disfrutar de tus hobbies puede reducir significativamente los niveles de estrés y mejorar tu salud en general. No olvides dormir bien, ya que la falta de sueño afecta a las hormonas del estrés. Estas actividades no requieren inversión financiera, pero ofrecen valiosos beneficios para tu salud mental. 

Las técnicas de mindfulness y de reducción de estrés son herramientas poderosas para promover tu bienestar mental. Los ejercicios de respiración, la meditación o el yoga ayudan a calmar la mente, reducen la ansiedad y mejoran tu estado mental. Hay muchos recursos online, incluyendo apps gratis y canales de YouTube, que ofrecen meditaciones guiadas y ejercicios, por lo que puedes mantener estas prácticas sin costo alguno. 

Invertir en tu salud no tiene que drenar tu cuenta bancaria. Priorizando la prevención, manteniendo una alimentación balanceada, aprovechando tu plan de seguro, e incorporando actividad física a tu rutina, alcanzarás tu mejor versión sin comprometer tu salud financiera.